El frío y las lluvias han retrasado la campaña que aun no ha empezado, cuando lo habitual es haber recogido ya la mitad.
De no mejorar las condiciones climatológicas, la cosecha de miel en Castilla y León será nula. Así lo aseguro el presidente de la Asociación de Palentina de Apicultores y secretario provincial de la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), Francisco Salvador, que apuntó que de momento no se ha recolectado ni un solo kilo de miel cuando lo normal a estas alturas de la campa es que se hubiera recogido la mitad. Salvador explicó que las bajas temperaturas y las lluvias de las últimas semanas han impedido a las abejas salir a recolectar, al mismo tiempo que ha evitado que las flores generaran néctar por lo que no se ha producido nada de miel. Añadió que en una temporada normal a principio de julio se recogen entre 8 y 10 kilos de miel por colmena, que produce cerca de 20 kilos en toda la campaña.
Salvador recalca que la situación es idéntica en todas las provincias productoras de miel de la región, tal y como quedo expuesto durante la reunión de profesionales de la apicultura de Castilla y León celebrada días atrás.
También apuntó que la campaña se había presentado muy buena al principio de la primavera por abril registró unas condiciones excelentes, pero llegó mayo, y el frío y las lluvias registradas desde entonces han provocado un retraso en el campo que impide la producción de miel, explicó.
A ello hay que añadir que en abril gracias a las altas temperaturas hubo un importante desarrollo de los enjambres que aumentaron de forma significativa su población y que ahora no pueden alimentarse por la falta de néctar. Agregó que esta situación está obligando a los apicultores a dar de comer a las abejas con el consiguiente gasto y trabajo añadido que supone.
Francisco Salvador considera que todavía la campaña no está totalmente perdida siempre que la subida de temperaturas que ha empezado a registrarse el fin de semana se mantenga durante todo el verano, para que las flores puedan desarrollarse y las abejas recolectar. La temporada concluye en septiembre pero la de este año aunque cambie la climatología será mala respecto a la media de otros años en la que se recogen unos 20 kilogramos por colmena.
A los problemas que está acarreando el tiempo, se añaden los problemas económicos, que está atravesando el sector en la Comunidad y que tienen parte de su origen en que todavía no han recibido los pagos de las ayudas agroambientales por parte de la Junta de Castilla y León. Recordaba que en años anteriores los ingresos ya se habían realizado en julio y denuncia que a estas alturas del año tampoco se han convocado las ayudas para 2014.
Otros problemas que está sufriendo la apicultura, especialmente en la provincia de Palencia en las explotaciones situadas al norte, son los ataques de los osos a colmenas, aunque en este momento es el menor de todos los que temores.
En Castilla y León se contabilizan unas 250.000 colmenas de productores profesionales y es la tercera Comunidad de España, que cuenta con 2,5 millones de colmenas, mayor productora de miel después de Andalucía y Valencia.
Por provincias, a la cabeza en producción de miel se sitúa Salamanca, seguida de Burgos y Palencia, donde hay unas 14.000 colmenas