La propagación del
coronavirus en Portugal, y el hecho de que el Gobierno luso se plantee cerrar
fronteras, preocupa a los apicultores extremeños que tienen instaladas colmenas
en el país vecino y que ven como podría peligrar el mantenimiento de éstas.
El responsable de la
Sectorial de Apicultura de Asaja Extremadura, Paulino Marcos, ha afirmado a Efe
que existe "mucha incertidumbre" en estos apicultores, principalmente
de las zonas de las Hurdes y Gata, pues podrían perder la producción de esas
colmenas.
Según ha explicado,
apicultores extremeños han instalado colmenas en municipios portugueses debido
a que el territorio luso, pese al crecimiento del sector en los últimos
tiempos, está “menos saturado” de colmenas, y por tanto disponen de más
espacio.
Los profesionales
extremeños residen en la comunidad pero acuden a diario al cuidado de estas colmenas,
las cuales quedarían desatendidas con un cierre de fronteras.
Según ha explicado
Marcos, la mañana ha sido muy intensa por las llamadas de muchos apicultores
extremeños que temen vivir esta situación, más si cabe tras la decisión de
algunos países como Serbia y Dinamarca de blindar sus fronteras, lo que
preocupa pueda pasar en Portugal, cuyo gobierno ya ha planteado que esa
posibilidad existe.
Estas colmenas
permanecen durante invierno y primavera, donde el clima es similar al existente
en la comunidad autónoma, y ahora sería inviable retirarlas, pues se está en
plena actividad, la cual se frenaría “con cualquier golpe en la colmena durante
el traslado”.
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